lunes, 7 de marzo de 2011

Las cuerdas aflojadas de Paganini



Ayer escribí una entrada sobre el poder de la palabra... y hoy me gustaría hacerlo sobre el poder de la convicción personal, de la superación... En alguna ocasión se ha asociado al virtuosismo de un genio del violín, como lo fue Niccolò Paganini... En la red pululan correos de este tipo, de la superación humana, de luchar frente a las adversidades... y casi todo el mundo recuerda la historia de Paganini, tocando su violín en un concierto ante una multitud espectante y que una a una se van rompiendo las cuerdas de su violín, mientras él, contorsionándose para hacerlo lo mejor posible, para dar vida a cada nota que salía de su violín... para demostrar quizás, que no había ningún otro como Paganini...

Mucho se ha hablado acerca de este virtuosismo, leyendas que circularon incluso en vida de Paganini, desde que estando en la cárcel por asesinar a su amante, vendió su alma al diablo para tener el "don" que le acompañó durante toda su vida... Incluso hay otra leyenda que dice que estando en la cárcel, se quedó sin cuerdas en su violín y tuvo que ingeniárselas para poder tocar con una sola cuerda... En aquella época, incluso creían que dentro de su violín ( que no se separó de él incluso en su lecho de muerte ), estaban encerradas las almas de bellas cantantes, dándole así el tono característico de una voz humana que provenía del violín cuando era tocado por Paganini...

Lo cierto es que todo esto quizás se deba a la genética del artista, pues durante un tiempo se creyó que tenía el Síndrome de Marfan ( Amenofis IV también lo tuvo ), aunque realmente, se ha postulado más por el Síndrome de Ehlers-Danlos, que ha tomado más fuerza por el hecho de la elasticidad que tenía Paganini cuando tocaba el violín, llegando casi al contorsionismo, entremezclando los codos, hombros... para sacar notas imposibles de su "Guarneri"... 

Como dato curioso, decir que tuvo cinco Stradivarius y dos Amati...

Sólo hay una fotografía de Paganini, que ésta que aparece aquí... 

Paganini


De él se ha dicho que tenia fama de ávaro, pues cuando se hizo famoso cuadruplicó e incluso quintuplicó sus honorarios cuando hacía giras... aunque parece que es una fama poco merecida, pues ayudó a compañeros de profesión cuando éstos lo necesitaban, como es el caso de Berlioz, al que extendió un cheque por valor de veinte mil francos...

Para terminar, comentar que la historia de las cuerdas rotas no es más que una enseñanza, pues jamás sucedió esto de verdad... La realidad es que a Paganini le gustaba superarse a sí mismo, tanto, que lo que hacía era aflojar las cuerdas de su violín para tratar de sacar esas notas "imposibles", haciendo verdaderos malabares sobre su violín... No olvidemos la elasticidad de sus miembros... 

La verdadera enseñanza quizás, es que nada es fruto del azar, que todo viene por un trabajo de años de sacrificio, pues su padre por ejemplo, le obligaba a ensayar con el violín durante diez horas diarias... Era un virtuoso, sí, pero todo debido al esfuerzo de horas diarias de ensayo, días, semanas, meses... hasta que el fruto de la semilla, se convirtió en árbol...

Hasta la próxima entrada...

Upuaut

El poder de la palabra: Shaw Vs. Churchill

ShawChurchill


A veces sucede que nos encontramos con genios indiscutibles en el uso de la palabra... Tal es el caso de los dos personajes de los que hablaré hoy, como son Winston Churchill y George Bernard Shaw... El primero, inglés y estadista, famoso además por los libros sobre historia que escribió y con una más que sorprenderte capacidad de oratoria, tanto que es considerado como el gran orador del Siglo XX... y por otro lado, Shaw, irlandés al que sus comienzos no fueron nada fáciles y que poco a poco fue ganándose el respeto que le correspondía por parte del público... Shaw, al igual que Churchill, era un político irlandés al que por razones de historia, ya había más que motivo suficiente para que hubiese confrontaciones entre ambos... 

Pese a tales disparidades entre ambos, los dos compartían un Premio Nobel de Literatura, los dos eran políticos, los dos tenían una lengua afilada y mordaz e incluso se tenían el mismo grado de simpatía y reciprocidad... todo sea dicho...

Tal grado de enemistad que se profesaban mutuamente, quedó reflejado en una anécdota, la cual me recordó un correo electrónico que recibí hace muy poco y que es totalmente veraz...

La anécdota es la que a continuación os cuento, que tiene su origen en un cruce de cartas de ambos personajes en 1923. Aún faltaba para que Churchill fuese el estadista que dirigió el país en la Segunda Guerra Mundial...

SHAW: "Estimado Winston Churchill: Tengo el honor de invitarlo al estreno de mi obra "Santa Juana". Venga y traiga un amigo... Si lo tiene." Firmado, Bernard Shaw

CHURCHILL: "Agradezo al ilustre escritor la honrosa invitación. Infelizmente no podré concurrir a la primera presentación. Iré a la segunda... si la hay". Firmado, Winston Churchill

Desconozco si Churchill al final fue o no a la segunda presentación de "Santa Juana", pero lo cierto es que la obra fue un éxito rotundo, tanto que es considerada la obra maestra de Bernard Shaw...

Es una pena que a día de hoy, se haya perdido la caballerosidad y el uso de la palabra como se hacía antaño, donde en una frase, quedaba resumida toda una declaración de intenciones... para bien o para mal, pero que seguro que a ambos, les podría más la sorna y la risa que la seriedad, por muy inglés que uno sea...

Sobre Churchill, un día explicaré el origen de la "V" de Victoria... que seguro que os resultará muy curiosa...

Quedan muchos temas pendientes, lo sé... 

Hasta la siguiente entrada, que espero no tardar mucho...

Upuaut